Por Rafael Gómez Chi
La empresaria Maru Medina tiene una filosofía que se aparta de lo normal. La fundadora de Kukis by Maru, las galletas que llegaron para quedarse, emplea millenials pero no los adapta a su compañía, sino todo lo contrario. Y recurre mucho a la tecnología.
Maru Medina impartirá una charla sobre esos y otros tópicos empresariales en el Club Libanés este miércoles 21 y jueves 22 de octubre como parte de las actividades que la comunidad libanesa promueve para una mejor reactivación económica.
El presidente del Club Libanés, Sergio Abraham Rodríguez, comentó que la conferencia presencial será para un aforo de 75 personas, pero se transmitirá de manera gratuita en la página de Facebook de la organización. Pueden participar socios y público en general.
La plática es a las siete y es una manera de contribuir a que la reactivación económica sea mucho mejor y la gente tenga elementos para hacer felices a los trabajadores y a los clientes, que haya una empatía para que todos salgamos adelante, comento Abraham Rodríguez.
Pero antes, Maru Medina comentó que una de las cosas que ha llevado a cabo es no volverse una líder sólo porque sí para exigir la excelencia.
—Una de las cosas que pienso es que muchos empresarios gastan demasiados recursos en sus hijos. Yo lo que digo es que gastes en el personal, que sienta lealtad. Eso es lo que voy a compartir. Porque lo que queremos es que la gente sienta que está creciendo. Todos queremos ser parte de algo más grande, y la empresa puede ser eso. Te pueden ayudar a ser un mejor padre, esposa, ciudadano. Si la empresa además de dar cosas esenciales te da un desarrollo, ya la hiciste.
—Yo trabajo con millenials, sólo tenemos a dos personas de 60 años en la empresa. Y lo que yo digo es que uno es que tiene que cambiar para que los demás lo hagan. Los jóvenes no tienen la culpa, la tecnología nos ha facilitado mucho las cosas y por eso tenemos los horarios que tenemos en Kukis by Maru.
—Todo esta sistematizado, estructurado, los millenials no se quieren sentir encarcelados, nosotros tenemos que ver cómo vamos a enseñar, no nacieron como nosotros, cambiar las cosas es difícil pero si yo cambio me encuentro cosas nuevas.
La empresaria explicó que de lo que se trata es de apapachar a la gente. “Yo siempre les digo que están para hacerle el día feliz a otro, si no, no trabajes aquí. Todos quieren un apapacho”.
—Estamos conscientes de que somos creadores de nuestro futuro y los malos momentos no son para siempre. La abundancia es mala muestra. La pandemia, las lluvias son para que nos eduquemos.
—Necesitamos leernos, necesitamos espacios que nos ayuden a crecer, empresas que nos ayuden a crecer, con el éxito de las marcas. Gracias a los amigos del Club, estaremos hablando de una buena cultura laboral, esa empresa donde nadie se quiere ir porque sabe que esta creciendo y tienes oportunidades.
La charla se basará en diez puntos, entre ellos, saber quien es tu cliente. “Puedes tener la maravillosa tecnología, pero si quien trabaja para ti, la recepcionista, el que acomoda los autos no te hace sentir bien, no haces nada. Comencemos a invertir en capacitación humana, es importantísimo ese sentimiento que dejamos en cada una de las empresas”, indicó.
“Esto no es sólo para empresarios, a veces la gente piensa que son estadísticas, no. Me gusta dar consejos prácticos para problemas comunes, no son fórmulas, es habla de la vida. Las empresas no son entes económicos, sino personas, necesitamos saber como comunicar y cuando uno sabe hacer eso, entonces le sirve para la gente”, dijo.