A nivel municipal, gobernarán al 75 por ciento de la población. Ganan 14 distritos locales
Por Rafael Gómez Chi
Mérida, Yucatán, a 7 de junio de 2021.- Además de la mayoría en el Congreso del Estado con 14 diputados y diputadas que se perfilan a la victoria, el Partido Acción Nacional se apunta a gobernar el 75 por ciento de la población con resultados que sólo indican una cosa: el respaldo a la gestión del Gobernador Mauricio Vila Dosal.
Los electores decidieron que el 75% de los yucatecos tendrá un gobierno municipal panista, pues ganaron los principales y más grandes municipios, entre ellos Mérida, Progreso, Kanasín, Umán, Tizimín, Valladolid, Tekax y Tinum. Cabe destacar que es la primera vez en la historia de Yucatán que el PAN gana el municipio de Valladolid al arrebatárselo a Morena.
De acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares serán 42 municipios yucatecos gobernados por el PAN, más 5 por la alianza PAN-PANAL. Un resultado importante desde la mitad del primer gobierno panista en el 2004. En el 2018 el PAN sólo obtuvo 27 alcaldías.
En el Congreso del Estado hasta ahora en el conteo rápido, el blanquiazul va arriba en 14 de las 15 que se disputaban. Esto significa que se ganaron diputaciones del interior del estado que antes pertenecían al PRI.
Ante esta situación, el PRI sólo gobernará ahora al 13% de los yucatecos y Morena queda en el tercer lugar con sólo el 12%, en lo que representa un debacle para los tricolores.
El gobierno de Mauricio Vila recibe de esta manera una aprobación y respaldo contundentes, fruto de un trabajo que se ha centrado en la generación de más empleos y mejor pagados gracias a la creación de las condiciones para atraer inversiones locales, nacionales y extranjeras.
Además, se reconoce el trabajo realizado por el gobernador en el que se considera el peor año de la historia de Yucatán, debido a la cuantiosa reducción de los ingresos del estado a través de las participaciones federales, la llegada de dos huracanes y tres tormentas tropicales, y el azote de la pandemia de Covid-19, que afectó todas las actividades económicas.
Con decisiones que privilegiaron la salud de las familias yucatecas y creando las condiciones para una reapertura gradual y segura de las actividades económicas, lo que evitó el desbordamiento de la capacidad hospitalaria de Yucatán, es como el gobernador parece haber convencido de que se avanza por el camino certero hacia la recuperación social y económica.