Por Rafael Gómez Chi
Justina Hau Aké aguardó las reacciones de la vacuna del Covid-19 acurrucada junto a la cortina amarilla. Cuando le pincharon el brazo derecho por la enfermera del Hospital General de Valladolid cerró los ojos, pero no mostró ningún gesto de dolor ni se quejó de nada.
A un metro, más o menos, de ella, el Gobernador Mauricio Vila Dosal observaba con las manos entrelazadas por detrás, como cuando alguien espera algo.
—Ha vuelto la esperanza —dijo el Gobernador cuando encaró a la prensa en el pasillo posterior del nosocomio.
Y José Francisco Iturralde Ávila, jubilado del Seguro Social, dijo al cronista que se sentía magnífico. Hasta se dio tiempo de bromear con la directora del nosocomio Lorena Barradas Rodríguez. “Si es la antirrábica, ¡claro que me la pongo!”, soltó y se carcajeó.
Miró a la poca prensa que había a su alrededor y preguntó si no había alguien más que el cronista para que lo entreviste.
Un soldado veía a la distancia la vacunación. Otro militar custodiaba la entrada del hospital. No había gente aglomerada.
—Esto es lo que estábamos esperando para que nos dé certidumbre, para que nos dé seguridad —dijo José Francisco.
—¿Cuándo le llamaron?
—Hace 15 días nos hablaron y tomaron nuestros datos y luego nos registramos en la plataforma.
—¿En su familia alguien ha tenido Covid-19?
—Sí, como no. De mis cinco hijos, dos han tenido Covid, viven en Cancún.
—A usted ya le dio Covid-19?
Yo no, para nada. Hago mi lavado de manos, uso cubrebocas, guardo la sana distancia. Todo lo que se recomienda.
—¿Y su esposa?
—Va a venir. Está en Cancún.
Esteban Euán Hau, de 82 años, caminó lento hacia la prensa y, sosegado, se dijo contento por haber sido vacunado.
—Acabamos de atestiguar las dos primeras vacunas de Covid-19 para los adultos mayores —dijo Vila Dosal y dio un resumen de las que se aplicaron en Valladolid, Motul y Conkal, municipios donde empezó de manera simultánea la aplicación del biológico.
—Son de Astra-Zeneca, son de las más manejables, son temperaturas de dos a ocho grados y se requieren dos aplicaciones entre 21 y 35 días después, es lo que tenemos —dijo el mandatario y reiteró que “todo el proceso de planificación y de logística de lo que es la vacunación, lo lleva a cabo el Gobierno federal”.
Dijo que “hemos sido informados que en estos municipios, de acuerdo al número de vacunas que llegaron, va a ser suficiente para poder vacunar a los adultos mayores. Entonces, esa es la estrategia que se siguió, que donde llegaran las vacunas, se pudiera atender a todos los adultos mayores, y es el Gobierno federal, a través de la Secretaría de Salud federal, que están determinando dónde y a quiénes les van a estar poniendo las vacunas”.
Las vacunas se aplicarán esta semana y se debe concluir el sábado 20 de febrero de 2015. “Se podría tener más capacidad para vacunar a un mayor número de personas, pero se tendría que poner más vacunadores, pero se está haciendo de esta manera, tenemos los 5 días, el tiempo de las vacunas es prudente y, en ese sentido, para evitar aglomeraciones y que haya un esparcimiento mejor”.
Informó que las demás vacunas estarán llegando al Estado la próxima semana, serán de Pfizer para que se pueda continuar con la vacunación del personal de salud, que, “sin duda, es una de las grandes peticiones que hemos hecho desde aquí en Yucatán, que se dé preferencia al personal de salud, que se pueda aplicar la segunda dosis, y no solamente de hospitales públicos sino de hospitales privados”.
—¿Hay alguna contraindicación o algo para la gente que va a venir a vacunarse?
—Mira, no hay ninguna contraindicación, pueden haber las reacciones adversas que puede generar cualquier otra vacuna, que puede ser mareo, vómito, que en algunos casos extremos puede ser otro tipo de condiciones, pero en estos momentos no hay ninguna contraindicación.