El alcalde Edwin Bojórquez otorgó el permiso a un banco de materiales muy cerca de una unidad habitacional. Exigen que se detengan los estallidos
Por Andrea Segura Rodríguez
Kanasín, Yucatán, 17 de junio de 2022.- Hartos, las y los vecinos del fraccionamiento Santa Ana exigieron a los representantes del banco de materiales de la empresa Sumainsa dejar de usar explosivos en sus labores, pues ayer una explosión realizada cerca de las dos de la tarde generó daños en sus viviendas.
Además, sostienen que afecta la salud de adultos mayores y menores que sufrieron crisis nerviosas ante la intensidad con la que se sintió esta explosión en las viviendas que se encuentran a escasos metros de dicho banco.
Cabe señalar que la autorización del funcionamiento de este banco de materiales se otorgó el 19 de noviembre del 2021 por parte de la actual administración del alcalde Edwin Bojórquez, a quien los vecinos señalan como más preocupado porque luzca el arco de la entrada que en solucionar los problemas de Kanasín.
Las y los vecinos aseguraron que muros, techos, ventanas y otros artículos domésticos como televisores, resultaron afectados tras esta explosión. Esta no es la primera vez que ocurre un estallido y provoca daños, pues en abril del presente año sucedió lo mismo.
“En esa ocasión la constructora se comprometió a pagar las reparaciones y sí lo están haciendo, pero también quedamos en un acuerdo en no realizarían explosiones de alta intensidad, lo cual no cumplieron. Esta se sintió más intensa que la anterior”, aseguró Cindy Villanueva, una de las vecinas afectadas.
Los vecinos señalaron que esperan llegar a un acuerdo con los representantes de la constructora, así como las autoridades municipales para darle solución al tema. Ellos piden que no haya más explosiones.
“Tienen tres meses que comenzaron con las explosiones. De las ocho que han realizado, dos ya se les salieron de las manos y fueron muy intensas”, aseguraron.
Indicaron que se acordó una reunión hoy con las autoridades del Ayuntamiento de Kanasín para darle una solución a esto, pues los vecinos llevan meses viviendo con estallidos que pudieran atentar contra su seguridad.