Por Rafael Gómez Chi
El cronista disparó a bocajarro.
—¿Se ha encabronado por algún meme suyo?
—Con todos…
—No, en serio.
—¡En serio te lo digo!
Mauricio Vila Dosal iba y venia sobre la pequeña tarima, dando pasos como saltitos. En mangas de camisa y pantalones de mezclilla.
El salón del Centro Internacional de Congresos estaba lleno de representantes de medios de comunicación, algunos periodistas y, en la última fila, a varios metros de distancia del Gobernador, cerca de los bocadillos, el café y la inefable Coca Cola, el cronista.
La reunión, que el cronista no se explica por qué tardó tanto en realizarse, fue para que Vila Dosal explique que el Gobierno del Estado trabaja ya en diversas estrategias en beneficio de los yucatecos y que servirían para evitar el avance del Coronavirus en la entidad.
El Gobernador explicó que se está considerando una nueva reubicación de paraderos, además de la reestructuración de algunas calles en el Centro Histórico, con el fin de permitir una mayor movilidad entre peatones y evitar las aglomeraciones.
La reunión se programó para el ocaso. Después del aguacero que bañó el Centro Histórico, el cronista arribó puntual a las siete de la tarde. Previa identificación se presentó a la mesa de registro donde una sonriente ujier le pidió que dejara el teléfono celular en una bolsa de papel y entrara sin él.
Sin problema alguno ni remilgo de ninguna clase, el cronista accedió a dejar el teléfono y entró. Apostó, como en casi toda su vida de periodista, a su memoria
Vila Dosal entró al salón en silencio. A diferencia de otros eventos, la prensa solo lo miró sin aplaudir. Iba acompañado por Maurio Sauri Vivas, el titular de Salud y otros funcionarios. Eduardo Cabrera Ruiz, su director de Comunicación Social dio la bienvenida.
Palabras más, palabras menos, Vila Dosal expuso las razones de sus medidas y dedicó tiempo al tema de la ley seca. Precisó que se está considerando el permitir que los restaurantes puedan laborar los días sábado y domingo, pues es durante el fin de semana que registran las ventas más altas, mientras que lunes y martes podrían vender solamente con servicio a domicilio, pues según los propios restauranteros, son estos los días con menos actividad.
Anticipó que la venta de alcohol, podría permitirse durante la primera semana de septiembre y el cronista por poco se para a aplaudir pero se contuvo. Según el mandatario la implementación de la ley seca ha dado los resultados esperados pues los indicadores van a la baja en estos días.
Por espacio de una hora el Gobernador fue dando sus razones y la prensa escuchaba. Nadie estaba distraído, claro, no tenían con qué. Dos o tres tomaban notas, los demás no. Uno podía bostezar ampliamente y nadie se iba a percatar debido al cubrebocas, pero al parecer ninguno dormitó.
Al cabo de un tiempo el Gobernador abrió la sesión de preguntas. El cronista alzó la mano y Vila Dosal reaccionó. “Uta, va a preguntar Gómez Chi”. Pero los ujieres le acercaron el micrófono al periodista Josué Sánchez Salazar. “A ver, primero las damas”, bromeó el mandatario. Luego le dieron la voz al cronista.
—Gobernador, una pregunta política, ¿está considerando cobrar el reemplacamiento?
—Si por mi fuera, no habría reemplacamiento vehicular este año, debido a la difícil situación económica por el coronavirus, pero aún no lo hemos decidido —soltó, sin problemas, sin aspavientos.
Admitió que la situación financiera de miles de familias yucatecas es complicada y que si fuera por él no fuera, no se realizara. Pero. Siempre hay un pero. Por cuestiones de seguridad tendría que hacerse ya que según el secretario de Seguridad Pública, Luis Felipe Saidén Ojeda, es riesgoso que hayan pasado cuatro años y no se tengan actualizadas las matriculas.
—Y además mucha gente viene a vivir acá, porque como lo quieran ver y pese a todo hay calidad de vida —subrayó el Ejecutivo.
¿Y porqué la pregunta es política? Pues porque el diputado Alejandro Cuevas Mena y la dirigencia estatal del PRI han pedido que no se cobre el reemplacamiento porque la gente no tiene dinero. Sin embargo, Vila Dosal también puso argumentos financieros en la mesa. Durante la contingencia por el Covid 19 el Gobierno del Estado dejó de recaudar recursos y no ha recibido partidas federales extras. “Por tener cerrado Chichén Itzá dejamos de recaudar 400 millones de pesos”.
—Tenemos diez días de acá a septiembre para decidirlo —precisó.
Y en otros temas y ante diversas preguntas, dijo que este año no se realizará la Feria Yucatán en X´Matkuil como tal, sino que sólo será un evento de corte ganadero, sólo para productores y con acceso mediante invitación.
El cronista miró el Casio que siempre lleva en la muñeca derecha. 21:44. Al más puro estilo francés, sin despedirse, el cronista emprendió la graciosa huida esperando que Saidén no vaya a detenerlo por la hora. Al salir, volvió a mirar aquel letrero: “Por favor deje su teléfono celular aquí”.