El Cronista Yucatán
La Asociación de Wedding Planners destaca que en vez de una boda para mil personas, prefieren una para 50 pero con las mismas experiencias
Por Rafael Gómez Chi
Mérida, Yucatán, 27 de julio de 2021.- Las parejas que se vienen a casar a Yucatán se han adaptado a la nueva realidad y hay nuevas tendencias, son bodas más chicas y con más experiencias para los novios, destacó Pilar de Alba Fernández, directora de Marketing de la Asociación Internacional de Planificadores de Bodas (IADWP, por sus siglas en inglés).
—Las bodas, gracias a Dios, no las hemos dejado de llevar a cabo, lo que ha pasado es que los wedding planners creemos que se han adaptado y gracias a su creatividad no han dejado de hacerse las bodas.
Dijo que los enlaces matrimoniales representan una gran derrama económica sobre todo para los hoteles, porque siguen organizando y trayendo turismo al Estado, pero también rebota en otros sectores como el gastronómico.
Antes de la pandemia era el número que sea, pero ahora el aforo ha cambiado de cien a 150 según los protocolos que se van dictando mes a mes, pero lo importante es que no han parado, dijo.
Como todos, ha sido un segmento golpeado pero sigue adelante, indicó y añadió que las parejas que vienen de fuera prefieren casarse en una hacienda, porque las playas son preciosas, pero hay quienes buscan otras, como las del caribe.
Las haciendas son preciosas, y los novios ven esos escenarios como que más adecuados a lo que buscan, dijo.
De Alba Fernández comentó que el costo de una boda depende del wedding planner, “pero estamos hablando desde medio millón de pesos, porque depende del número de invitados, el banquete, las experiencias de los novios, porque en lugar de una de mil personas pueden llevar a cabo una para 20 personas con el mismo costo”.
En lo gastronómico, dijo que piden platillos típicos e incluyen la cochinita. “Siempre vendrá en el menú, ya sea para la tornaboda y obviamente tenemos muchísimos platillos como el poc-chuc, los papasu´ules y demás”.
Finalmente dijo que las parejas provienen de Europa, Estados Unidos, Canadá y recientemente vienen más mexicanos a casarse a Yucatán.
