«El Halconazo», 51 años sin justicia

Aquella masacre del 10 de junio de 1971 del Jueves de Corpus Christi sigue en la memoria de ese México bárbaro. Nunca hubo castigo para los culpables

Por Andrea Segura Rodríguez

Mérida, Yucatán, 10 de junio de 2022.- Hoy se conmemoran los 51 años de la atroz matanza y represalia a la que fueron sometidos estudiantes tras protestar contra el estado mexicano, la conocida matanza del “Jueves de Corpus Christi” o “El halconazo”. 

En el marco de la conmemoración de este trágico hecho, organizaciones encabezadas por el Comité 68 Pro Libertades Democráticas reclamaron que esta masacre nunca fue esclarecida por el gobierno mexicano, así como que jamás se les investigó y castigó a quienes fueron señalados como los culpables de esta histórica represión, la cual aseguraron que jurídicamente no está cerrada, ni concluida.

Aquel día estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Instituto Politécnico Nacional (IPN) convocaron a una manifestación en apoyo a la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) La movilización se llevó a cabo en el Casco de Santo Tomás, en el norte de la Ciudad de México.  

Más de 200 jóvenes de entre 14 y 22 años fueron asesinados por el grupo paramilitar llamado «Halcones». Sin embargo, el gobierno encabezado por el entonces Presidente Luis Echeverria Álvarez no encontró culpables y la justicia no ha llegado para las familias de esos estudiantes ni ha dado con los responsables de la masacre.

La historia señala este hecho como una sangrienta represión contra universitarios que apoyaban los reclamos de los estudiantes de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Profesores y estudiantes de dicha universidad habían presentado a fines de la década de 1960 una ley orgánica que proponía un gobierno paritario, y en 1971 llegó a la rectoría, ya bajo esa ley, Ulises Leal Flores, académico que había encabezado el movimiento a favor de la autonomía de la Universidad. 

El gobierno estatal estuvo en desacuerdo con esa regulación y en respuesta redujo los presupuestos y obligó al Consejo Universitario a suprimir la autonomía universitaria. Hecho por lo que los estudiantes iniciaron una huelga, y distintas universidades del país como la UNAM y el IPN los apoyaron realizando una protesta en la capital del país. 

Fue durante la protesta que el grupo de choque “Los Halcones”, jóvenes de zonas marginadas de la capital del país que eran entrenados por militares mexicanos y estadounidenses, se infiltraron a el contingente y abrieron fuego contra los cientos de estudiantes que se manifestaron.

Un hecho necesario para entender lo que sucedió el 10 de junio de 1971 es que fue la primera manifestación a la que se convocó después de la masacre de Tlatelolco. Algunos de los líderes de ese movimiento que habían sido arrestados salieron de prisión, y otros habían vuelto del exilio. Las cenizas del 68 que aún se encontraban ardiendo, tenían que ser asfixiadas.