“Hoy nos falta una. Nos falta Fernanda”, se leía en la manta que las mujeres portaban al frente por todo el Paseo de Montejo.
Se abrían paso a claxonazos.
—¡Ni una más! ¡Ni una más! ¡Ni una asesinada más!
Eran cientos, tal vez miles, los presentes.
—Hoy las única que alzamos la voz somos las mujeres, tenemos que alzar todos la voz, la sociedad para que esto cambie y Mérida siga siendo tranquila y siga siendo blanca —dijo la señora Lizbeth Ethel Martín Esquiliano, madre de la víctima de feminicidio.
Indignadas e indignados, mujeres, hombres, niñas, niños, expresaron el dolor que tenemos todos por la violencia que ha arrebatado la vida a ocho mujeres este año.
Fernanda fue asesinada a balazos por el ex novio hace unos días. El agresor se suicidó.
Por eso este domingo al crepúsculo, la familia Gual Martín caminó acompañada por cientos de personas con esa manta. “Hoy nos falta una, nos falta Fernanda”.
—¡Ni una más! ¡Ni una más! ¡Ni una asesinada más! —se volvía a escuchar, una y otra vez.
—Hoy estamos reunidas para exigir justicia y verdad por Fernanda, si las autoridades avalaron con su silencio y sus omisiones la violencia feminicida, nosotras no. Exigimos justicia para Fernanda, pero también para Henrietta, Gladys, Ana, Suemi, Yazmín, Irlanda, Norma Yolanda, Yamili, y muchas otras mujeres que han sido y son víctimas de la violencia de género en Yucatán —dijo la mamá.
Definió a su hija como una mujer empática y sensible al dolor ajeno. Hoy la lucha es por las mujeres que se apagaron por un feminicida.
—Ante el silencio por parte de las autoridades, exigimos que el Gobierno del Estado y los Gobiernos Municipales se pronuncien de manera pública en contra de la violencia de género, y condenen públicamente estos feminicidios —agregó la mujer.
Las personas presentes exigieron un informe público y detallado de los casos de feminicidios cometidos durante el 2020,identificando las omisiones, errores y obstáculos en la actuación policiaca, administrativa en Yucatán, del personal de salud yo educativo, que permitieron o facilitaron la comisión de estos delitos.
También que se adopte un plan para la erradicación de la violencia contra las mujeres y que las autoridades investiguen con enfoque de género, sin revictimizarlas como familiares, y permitiéndoles participar en el proceso.
—A los medios de comunicación, les exigimos adoptar protocolos editoriales con perspectiva de género para abordar noticias sobre violencia de género, con el objetivo de no ser, así sea sin darse cuenta, fuente de validación para los agresores —pidió. Y es que buena parte de la prensa ha sido banal en estos asuntos.
—Lo que hoy como familia nos mueve, es continuar con el legado de Fernanda, y luchar para que no haya otra Fernanda, que ninguna otra mujer sea violentada, y que todas puedan vivir libres de violencia —indicó.
La hermana de Fernanda, Sthepanya dijo que si bien el hombre que la asesinó no podrá enfrentar las consecuencias de sus actos, la justicia se exigirá para todas las demás.
—¡Ya basta de vivir con miedo de ser el siguiente feminicidio!
El Monumento a la Patria fue resguardado con vallas metálicas, cosa que fue muy señalada y criticada por las personas que se manifestaron, pues no pudieron colocar recuerdos de Fernanda ni proyectar un video de manera correcta.