«El próximo año si tú desfilas, yo también», dice Renán Barrera a Liborio más tarde en el Salón de la Historia. Ambiente relajado
Por Rafael Gómez Chi
Mérida, Yucatán, 16 de septiembre de 2022.- “Maare, estoy entre puros candidatos”, dijo casi a quemarropa el Comandante Luis Felipe Saidén Ojeda apenas se paró en medio de Liborio Vidal Aguilar y Rommel Pacheco Marrufo.
Sin incomodarse, quizá porque el comentario vino de alguien como Saidén, Rommel no perdió el tiempo y reaccionó apuntando a Liborio como diciendo sin decir, “acá el candidato es él”. El aludido soltó la carcajada y aplaudió.
Eran las siete y media de una mañana nublada pero calurosa en el círculo del asta bandera de la Plaza Grande, donde minutos después el Gobernador Mauricio Vila Dosal habría de izar la enseña patria.
Además de la expresión de Saidén en medio de ambos políticos había un detalle que no habría de pasar desapercibido para alguien con la experiencia de un cronista curtido en los recovecos del protocolo oficial: Luis Felipe no había acompañado al mandatario desde el Palacio de Gobierno hasta ese círculo de la Plaza Grande, pues Vila Dosal hizo el trayecto del despacho hasta ahí junto con los mandos militares y navales de la plaza local.
¿Son coincidencias esa curiosidad y la de la escolta militar que la noche del Grito entregó la bandera al Gobernador en vez de la Secretaría de Seguridad Pública?
El pendón tricolor quedó en lo más alto, pero sin ondear por la ausencia del viento necesario y Saidén se fue, como de rayo, a encabezar la columna del desfile en la descubierta de motociclistas montado en una BMW.
Vila Dosal, su esposa Maria Eugenia Ortiz Abraham y sus hijos Mauricio, Santiago y Alejandrina vieron el desfile desde el balcón central mientras en el Salón de la Historia se servían café y bocadillos. Por cierto, el Gobernador llevó a sus hijos y Liborio a sus nietos.
La parada duró una hora con 25 minutos. Participaron cuatro mil 595 efectivos, de los cuales mil 37 fueron estudiantes y el reporte al finalizar fue “sin novedad”.
El informe oficial de los participantes no lo precisó pero entre ellos estuvieron, por primera vez en los últimos 30 años, todos los directores de primaria, secundaria preescolar, media superior y demás niveles de la Secretaría Estatal de Educación, pero no el Secretario, de modo que cuando terminó el derrotero estando juntos el Gobernador, Renán Barrera y Liborio, el alcalde de Mérida le dijo al vallisoletano: “El próximo año, si tú desfilas, también desfilo”.
Los tres se quedaron riendo y conversando una media hora en el Salón de la Historia, relajados. Se percibía un ambiente despreocupado de tal manera que incluso entre algunos compañeros de los medios de comunicación ese era el comentario.
Y es que las ceremonias de las fiestas patrias, sin quererlo, son fotografías políticas, más que los discursos, reflejan momentos de interpretaciones sin límites, pero que solo los más avezados saben leer.
Cerca del mediodía, cuando ya todo hubo pasado, Mérida se quedó a merced de un fin de semana lluvioso y beisbolero.