Por Redacción
Mérida, Yucatán, 20 de enero de 2025.- La posible deportación masiva de yucatecos desde Estados Unidos representaría un problema para la economía del estado. Las remesas enviadas por los migrantes yucatecos son una fuente de ingresos fundamental para muchas familias, especialmente en zonas rurales. Una disminución en estos envíos podría generar un impacto negativo en la calidad de vida de miles de personas.
El profesor Javier Becerril García, de la UADY, advirtió que la reducción de las remesas podría llevar a un aumento en los niveles de pobreza en Yucatán. Las remesas, según estudios recientes, superan en impacto a los programas sociales en muchas comunidades. Además, la competencia por empleos podría intensificarse con el retorno de los migrantes deportados.
La asociación Poder Migrante en Yucatán ha señalado que al menos 52 municipios dependen significativamente de las remesas. Ciudades como Oxkutzcab, Tekax y Peto son particularmente vulnerables a una disminución en estos ingresos.
La industria maquiladora también se vería afectada por las políticas migratorias de Estados Unidos. Un aumento en los aranceles o restricciones comerciales podría llevar a recortes de personal y a una disminución de las exportaciones.
Ante este panorama, expertos recomiendan a la población yucateca ser cautelosa con sus finanzas personales y evitar adquirir deudas innecesarias.