Por Redacción
Mérida, Yucatán, 25 de septiembre de 2024.- Movimiento Ciudadano se posicionó en contra de la militarización de la seguridad nacional por considerar que con dicha reforma no se solucionan los problemas de seguridad del país.
Asimismo, en cuanto la reforma constitucional en materia de pueblos indígenas y afrodescendientes la bancada naranja se posicionó a favor destacando que no solo es un documento legislativo
En el primer tema el coordinador de la bancada naranja Javier Osante Solís recordó que el compromiso como legisladores es con la sociedad yucateca, con las víctimas de la violencia pero sobre todo con el futuro de México como un país donde la paz y la justicia sean construidas por instituciones civiles fuertes y transparentes.
“Cuando una institución civil se militariza, se usa principalmente la fuerza sobre la justicia, y esto es incompatible con una política que ponga los derechos humanos en el centro” sostuvo Osante Solís, al hacer uso de la tribuna legislativa.
Agregó que la reforma se presenta como un intento de dotar de un marco legal permanente la presencia de las Fuerzas Armadas en las tareas de seguridad pública, lo que se contrapone a la promesa de regresar a los militares a los cuarteles.
“Este cambio, por el que nos llaman a votar, no sólo modifica el artículo 21 de la Constitución para adscribir la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), sino que también la define como una fuerza de seguridad pública permanente, integrada por personal de origen militar».
Las estadísticas muestran una realidad alarmante, puesto que de enero de 2019 a julio de 2024, la Guardia Nacional ha acumulado mil setecientos setenta y dos expedientes de queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, mientras que la Sedena acumula dos mil doscientos ochenta.
Dichos datos llevan al sexenio, que está por concluir, a ser reconocido como el más violento de la época moderna de nuestro país, con más de 195 mil homicidios dolosos.
En el tema de pueblos indígenas y afrodescendientes la diputada Larissa Acosta Escalante dijo que “es un día histórico para Yucatán y para México no solo es un documento Legislativo, sino una reivindicación de nuestra identidad y de los derechos de comunidades que han sido marginadas por siglos”.
Agregó que es el momento de reconocer de manera real y con fuerza la autonomía de los pueblos que han sostenido, enriquecido y dado forma a nuestra cultura; puesto que los pueblos indígenas y afrodescendientes no merecen ser tratados como una nota al pie de nuestra historia.