Más que combatir la corrupción y transparentar los procesos de asignaciones y licitaciones de obras, lo que se necesita es elevar la calidad en tiempos y costos establecidos, consideró el presidente de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC), Jorge Villalobos Herrera.
Al opinar sobre la propuesta de modificación a la Ley de Obras Públicas y Servicios que se analiza en la Cámara de Diputados, afirmó que resulta insuficiente combatir la corrupción, hacer más transparentes los procesos de asignación y licitaciones, pues de lo que se precisa es de la rapidez y la calidad.
Actualmente el 80% de las obras que se construyen en México no cumplen con el programa establecido en un inicio y por ende se terminan a destiempo o no cumplen con el presupuesto contratado inicialmente y se terminan con costos adicionales, dijo.
Lo anterior se debe a varias razones, entre ellas una discrecionalidad a la hora de la adjudicación de los contratos que permite al funcionario público hacerlo de manera individual sin una coparticipación de la sociedad civil y sin un acompañamiento de las áreas especializadas de los colegios, de los profesionistas, de los especialistas de las obras.
Por eso, insistió en que se requieren acciones contundentes para elevar la calidad de las obras en los tiempos y costos establecidos, a fin de que estén en tiempo y forma, agregó Villalobos Herrera.
Por eso en la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción observamos con reservas muchos de los puntos planteados que se pretenden modificar y que votarán en el pleno los diputados federales como un retroceso de la Ley de Obras Públicas a un esquema que ya vivimos en el pasado, que se probó que no funciona, por sus características de sobre regulación y de ambigüedad.
Es imposible que la competitividad de los licitantes y de las licitaciones aumenten si se ponen reglas extraordinarias, además, el sobre regular los procesos licitatorios a lo único que nos va llevar es a eliminar la participación de muchas empresas.
Especialmente desaparecerán las pymes y aunque en el argumento de las modificaciones de esta Ley dice que ve por las pequeñas y medianas empresas, esto es falso totalmente porque sí les afectarán las modificaciones en la norma.
“Por eso estamos en contra de algunos de los puntos aquí propuestos. Estamos a favor de algunas cosas que se están llevando a cabo como propuesta, pero las que vemos con preocupación es las que inhiben la participación de las pymes en nuestra economía”, subrayó.
El país, a nivel estatal y municipal, requiere de empresas más fuertes que le den trabajo a nuestra gente, (albañiles, plomeros, electricistas, pintores, operadores de maquinaria etc.), porque no hay otra manera de sacar adelante a México, sino contratando de manera masiva a nuestros obreros de la construcción, dijo.